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jueves, 14 de agosto de 2014

Una fábula urbana

Tomando en cuenta la definición estricta de "fabula", tal vez pensaríamos que el director Alex van Wamerdam tenía la intención de crear una historia moralizadora y con tintes "educativos", pero todas estas ideas se desvanecen al presenciar durante 113 min. El largometraje ganador a la mejor película en la selección oficial del Festival de Sitges 2013, "Borgman".

A Camiel Borgman, personaje principal, se lo podría describir de muchas maneras, aprovechado, estafador, asesino, oportunista, etc. pero mientras las acciones que realiza, van tejiendo detalladamente la trama del film, el único adjetivo capaz de describirlo sería la de "ente".

Aquello que presenciamos en los primeros quince minutos de la película nos muestra la aparente historia de un "vagabundo" fugitivo (por razones desconocidas) que busca refugio en las casas de un pequeño barrio suburbano que, por su arquitectura, parecen salidas de un cuento para niños (elementos mágicos que le dan esa característica de fábula).

Con el afán de no revelar detalles que arruinen la intriga del largometraje (para aquellos que aún no la hayan visto) creo conveniente no describir más elementos de esta fantástica historia. está claro que haber ganado en el certamen de Sitges, condiciona nuestra mente en tal forma que "esperamos" una historia de ciencia ficción, lo cual no deja de ser cierto, "Borgman" es eso, pero va más allá del simple hecho de sorprendernos, poniendo en tela de juicio conceptos como la relación en pareja, el matrimonio, la "vida perfecta", etc.


Fábula es el término que ha servido para describir este largometraje estrenado en el año 2013, quizás se vuelva una palabra bien aceptada por la comunidad mundial y, esto puede significar el nacimiento de un nuevo género de cine, influenciado por corrientes anteriores de realizadores que tienen bien definido su estilo. Pasolini, el italiano conocido por "120 días de Sodoma", tiene una influencia bastante fuerte en Warmerdam, quien en varias entrevistas se ha identificado como un seguidor de su filmografía.




El terror se encuentra en los hogares

En los ultimos años las peliculas de suspenso se han centrado en temas demasiado convencionales como secuestros, extorsiones, chantajes, etc. "We need to talk about Kevin (Tenemos que hablar de Kevin)", le da un giro a los clásicos thrillers conocidos en el septimo arte, para explorar un aspecto interesante de las relaciones familiares, ¿hasta donde puede llegar el mal comportamiento de un hijo?

Desde el nombre del film, se nos da una idea acerca del personaje principal, Kevin, pero la incertidumbre del espectador continua, preguntandose "¿Qué es lo que tienen que hablar de él? 
De forma anacronica, se nos va relatando la vida de una pareja de los suburbios estadounidenses, que decide casi a los 40 años, tener un hijo.

Combinado con retrospectivas acerca de la vida de la madre, la trama nos sumerge en los conflictos que tiene ella para tratar con su hijo, quién demuestra una personalidad violenta desde muy pequeño. 
Esta caracteristica se va acrecentando conforme llega a la pubertad y posteriormente a la etapa de adolescente. 

Siempre he creído que lo mejor que puede hacer un director, que incursiona en el genero del suspenso o del terror, es combinar formas ya conocidas de estetica cinematografica para mantener el interes en la historia. La directora de orígen Escoces, Lynne Ramsay, tomó muy en cuenta esto, y lo que parece ser una historia contada desde el final, se convierte en un collage de imágenes de diferentes tiempos de la trama. 

Con especial cuidado en la fotografía, los diferentes momentos de clímax nos dan una visión general acerca de que podemos esperar en el final, ya que desde el inicio, se presenta una escena de la madre hablando con su hijo, a la edad de 17 años,  encerrado en una carcel de maxima seguridad.

Ramsay, se arriesgo bastante al momento de dirigir un largometraje que aborda un tema tan complejo en todo el mundo. A pesar de estar basado en un libro, y ser presentado como una historia ficticia, muchos de uds. No tardarán en entablar las similitudes y relaciones que tiene este film con los diferentes acontecimientos que tuvieron lugar en Estados Unidos, entre ellos, la masace de Columbine, Colorado, que fue analizada en el documental de Michael Moore, "Bowling for Columbine".

"We need to talk about Kevin" requiere de toda la atencion que el espectador pueda brindar en una sala de cine, esto resulta necesario para no dejarse llevar por las primeras imágenes, y tratar de conectar todas las piezas para entender la historia.